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lunes, 15 de febrero de 2010

El joven cristiano (continuación del texto anterior)

   Pues bien, como lo prometido es deuda, continuamos con el mítico y legendaria Joven Cristiano. Ya hemos definido qué es un joven, y qué es un cristiano; y de la rara combinación de estos dos entes, surge lo que se conoce como joven cristiano (pero para ahorrar palabras, le llamaremos JC en esta ocasión), y  para quienes no se detienen un a observar con detenimiento, esto no seria mas que "un cristiano en una edad entre 15 y veititantos años). Error! Tratar de clasificar a al JC de esta manera, entramos en una ambigüedad tremenda. Es verdad que es un cristiano, si. Y es verdad que oscila entre esa edad, pero es mucho mas que una definición. Me explico:

   Si es de por si difícil ser un joven normal, del que se espera que pase por ciertas situaciones, ahora imaginemos lo que implica ser un joven, y ademas, ser parte de una comunidad cristiana; créanme, es tremendamente estresante si no recibimos el apoyo necesario. A las inquietudes propias de la juventud, como el alcohol, cigarro, drogas, mujeres, sexo, chicos, fiestas, antros, pornografía y demás; súmenle estar escuchando constantemente que toooodo eso es malo, y no nos podemos acercar, y si lo hacemos, nos quemaremos en un lago de fuego eterno, a un lado de todos los cochinos pecadores que también lo hicieron; Resultado: Una curiosidad más que grande por todas estas cosas. Por que con eso no logran espantarnos, oh no! pasa precisamente todo lo contrario, despiertan una curiosidad natural hacia eso que se nos dice NO! como si de perritos se tratara. He leído en algún lado, que el cerebro humano no considera la palabra NO, la omite, y que si nosotros decimos, o pensamos, no me quiero enfermar, es como si solo dijéramos ME QUIERO ENFERMAR, pues bien, esa no es la cuestión aquí, no estoy seguro de poder creerle a esa teoría; pero definitivamente, se que eso pasa constantemente en la cabeza de los jóvenes cristianos, sobre todo, en aquellos que nacieron y crecieron en un ámbito cristiano (no por que sean débiles, o faltos, o demás, sino por que aquello que no conocemos, es lo que mas nos atrae). 
   Cuantos de los que leen esto (hayan o no nacido en un hogar cristiano), cuando escuchábamos No hagáis esto, o no hagáis aquello, no nos sentíamos realmente curiosos por saber exactamente a que se referían? A cuantos de nosotros no nos llamaba la atención saber que ocurría en una "fiesta normal" o para ser exactos en una "fiesta MUNDANA"? (ahh, por que los cristianos tenemos como palabra preferida "mundano(a)" para toooodo lo que no es cristiano, o lo que CONSIDERAMOS no cristiano). 
   El combinar el termino cristiano a la palabra joven, es como tratar de juntar agua y potasio (si no lo has hecho te lo describo, imagina que al agregar el potasio al agua, es como si prendieras la mecha de un cohete buscapiés, que incluso, puede llegar a explotar). y tratar a un joven cristiano, no es lo mismo que tratar con un varón, con una mujer o con un matrimonio, NO! Es necesario que aquel que se aviente al ruedo con este ministerio tenga muy en cuenta que en cualquier momento puede ser ignorado, criticado e incluso, puede sufrir la peor de las armas de cualquier joven : la indiferencia. Uno de los riesgos que corremos al tratar de enseñar al JC es no hacerlo de la manera necesaria, ojo, no quiero decir que necesiten vestirse como nosotros, hablar como nosotros y tratar de parecerse a nosotros; Por favor, NO LO HAGAN! Lo único que se necesita es plantarse firmemente delante del grupo de jóvenes, con autoridad y confianza; pero sin parecer prepotentes y creídos; y hablar de la manera mas amena posible, con ejemplos, con vitalidad. Es sencillo no?
   No pretendo ser un especialista en jóvenes cristianos; pero soy uno de ellos, y me identifico con muchas de las dudas y problemas que he escuchado. He pasado por muchas situaciones que en verdad han puesto mi fe a prueba, y me han llamado la atención muchas tentaciones. En esos momentos es cuando más que nunca, necesitamos gente que nos apoye, que nos escuche, que sepa darnos un consejo, que sepa reprendernos con amor, que tenga en cuenta que es parte de nuestra vida cristiana el tropezar, y que nos ayude a levantarnos y sacudir lo pasado.
   Nosotros como jóvenes debemos entender que somos más que una definición, que somos más que una simple etapa de vida. Somos quienes en un futuro forjaran la historia del cristianismo, quienes le están poniendo el ejemplo a las generaciones que vienen. Somos los que podemos marcar un cambio tremendo en la vida de quienes nos rodean; porque, seamos sinceros, pocas cosas son mas impactantes que ver a un joven entregado a Dios. Si, es difícil huir de las tentaciones, es muy difícil tratar de explicarle al compañero enfadoso por que no vamos a antros, o por que no tomamos, o por que no hacemos esto o aquello. Es sumamente difícil no tener novio o novia que no sea cristiano  (y en algunos casos, no tener novia hasta que nos vallamos a casar :S). Pero si es posible; y sabes por que? Por que Dios ha puesto en nosotros la fuerza de la iglesia. Si! a ti, joven, le ha dado el privilegio de tener la vitalidad, el entusiasmo, las fuerzas, las ganas y el tiempo por delante para hacer grandes cosas en El; créelo!

   Para finalizar, no nos desanimemos si algún día decepcionamos a alguien, es norma, no nos desanimemos si algún día nos decepcionamos, es necesario; Al contrario, avancemos firmes, con la mirada hacia a delante, con nuestras vidas santificadas, y con nuestro corazón entregado. Por que si logramos hacer esto, Que cosa no lograremos?

Bendiciones.

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